Al desarrollar una voz interna compasiva, podrás acoger y regular de mejor forma tus emociones, de tal modo que puedas aprender a cultivar estados de calma y disminuir el estrés. Al mirar a tu crítico interno desde este punto de vista, podrás entender su función y buscar formas más saludables para cuidarte y darte apoyo. También el abrirte a recibir compasión de otros y ofrecer compasión a los demás puede contribuir significativamente a tu bienestar y el de quienes te rodean.